DEL CONTORNO BÁSICO AL VOLUMEN. Instalación.

Este proyecto plantea la conexión entre formas básicas: triángulo, cuadrado y círculo, dando lugar a distintas formas que se repiten.

En la instalación, el suelo actúa de soporte y la colocación aleatoria de madera conforma el bastidor, mostrando en el cristal el transito del plano al volumen de dos cubos maclados, dos prismas triangulares y dos cilindros. Su disposición obliga al espectador a tener una visión cenital.

SUPERPOSICIONES NO OBJETUALES. Cuadros.

En los cuadros, las conexiones se presentan como elementos gráficos planos y transparentes que dan lugar a espacios cerrados diferentes donde la forma ahusada se repite en las tres series. En sus intersecciones se introduce el color en un juego arbitrario de colores complementarios dando lugar a una serie finita de 50 piezas  de marcada abstracción geométrica. La lectura de estos cuadros en su conjunto se potencia por la repetición del mismo módulo.